PASAMOS UNA GRAN PARTE DE NUESTRA VIDA DURMIENDO

Pasamos un tercio de nuestra vida durmiendo. No obstante, solo soñamos por rachas de pocos minutos. Si calculamos un promedio, durante nuestra vida soñamos 6 años enteros.

A lo largo de este proceso, el cerebro se activa prácticamente en su totalidad necesitando para esto que el flujo de sangre en exactamente el mismo sea el doble que el preciso a lo largo del estado de vigilia. Solo parte del cerebro deja de marchar mientras que dormimos: el centro lógico.

Es precisamente por esto que los sueños adquieren, en muchas ocasiones, matices de irrealidad. Lo mismo  soñamos con serpientes, que tenemos una pesadilla,  o tenemos sueños dispares como soñar con personas,soñar con dientes, etc. Además de esto, para no expresar nuestros sueños, el cerebro manda señales a la medula espinal paralizando de esta manera nuestros miembros de forma temporal.

Lo único que movemos mientras que soñamos, lo que sucede a lo largo de la fase famosa como REM, son nuestros ojos, que se mueven de forma acorde con nuestra actividad en el sueño.

FUNCIONES DE NUESTRO CEREBRO CUANDO DORMIMOS

Una función esencial que cumple nuestro cerebro a lo largo del sueño es la de desechar y escoger los recuerdos. Es precisamente por esto que, al día después de haber estudiado, recordaremos mejor la materia si no pasamos la noche entera mirando apuntes y dormimos el tiempo preciso.

Es necesario, en consecuencia, dormir bien a fin de que lo que hayamos estudiado continúe en nuestra memoria al día después.

Cuando soñamos, nuestro cerebro procura solventar los inconvenientes que nos ocupan a lo largo del día. De ahí que, dormir puede ser la solución a un inconveniente que no logramos solucionar. También, un sueño puede ser un reflejo leal o bien, en la mayor parte de los casos, simbólico de lo que ocupa nuestra psique, de nuestros temores y de nuestros deseos.

Son de ahí que comunes ciertas pesadillas que evocan miedos como la carencia de confianza en uno mismo que se refleja muy frecuentemente en un sueño en el que la persona se halla desnuda en un sitio público y no logra ocultarse o bien taparse.

Freud mantenía que la función de los sueños era satisfacer nuestros deseos y, desde entonces, no se confundía. No obstante, esta es solo una de las múltiples contestaciones a la pregunta: ¿por qué razón soñamos? o bien ¿qué función cumplen los sueños?

La realidad es que ni los cientos y cientos de páginas webs sobre sueños, libros, especialistas en la materia, estudiados, se han hecho sobre los sueños, han podido dar una ligera idea de forma fehaciente a todas y cada una de las distintas preguntas sobre los distintos tipo de sueños que nos encontramos a lo largo de nuestra vida.